lunes, 26 de septiembre de 2016

Mozart European Gourmet (Pequeña serenata diurna)

¡Bienvenidos a Mozart!
¡Mozart European Goumet ya abrió sus puertas! Luego de haber presenciado en la intensa campaña que desataron en redes, confieso que ya estaba mordiéndome los codos de la impaciencia al ver como se dilataba la fecha de inauguración. Con todo lo que prometían, es obvio que mis expectativas fueran muy altas. Sólo pregúntense cuándo fue la última vez que un restaurante tuvo diez estaciones con los mejores insumos provenientes de España, Italia y Francia.

Entro emocionado al local, una anfitriona, muy cortés ella, me entrega una tarjeta plástica con el logo del restaurante. Si alguna vez estuvieron en Perú Pa'tí, deben estar familiarizados con el sistema. En la tarjeta se registran todos los consumos y al final se cancelan en caja. Algo me recuerda vagamente a Eataly, Chicago, restaurante donde en cada visita me sentí una de las personas más afortunadas del planeta. ¿Podrá Mozart hacerme evocar esos momentos?

El local cuenta con 800 metros cuadrados bien distribuidos entre las diversas estaciones, área de terraza, salón principal para almorzar y una pequeña barra donde tomar café italiano. Yo vine temprano pensando en desayunar un café americano acompañado de esos tremendos sándwiches que publicaron en su página de Facebook. Pequeño detalle, siendo el primer fin de semana desde que abrieron sus puertas, el mozo me informa con la mejor de sus sonrisas que solo tienen disponible el desayuno buffet. Eso te pasa por apurado, blogger.

Mesa del desayuno buffet.
Me acerco a la mesa para evaluar las opciones que tengo a disposición. Panes de la casa dulces y salados, bols con fruta fresca, platos con fiambres y quesos, y tres bandejas con bocadillos calientes: huevos revueltos, salchichas, tocino y papitas a la provenzal. No hay mucha ciencia pero teniendo en cuenta que lo que gasté desayunando a la carta hace una semana, bien vale la pena darle una oportunidad. Para comenzar una ensalada de frutas a mi estilo con un toque de miel, suficiente para limpair el paladar. Luego me sirvo un café pasado sin azúcar y comienzo a elegir entere la variedad de panes: campesino, baguette, integral, mini-ciabattas, francesitos. Me divierto armando mini-sándwiches con jamón, queso o aceitunas. ¿Desean algo dulce? También hay facturas, mermelada de la casa y queques, lo justo y necesario para empezar bien el día.

Regreso a la hora de almuerzo en busca de algo más elaborado. Hay una interesante selección de platos europeos en la carta como el gallo al vino, el boeuf bourguignon y el lomo strogonoff más yo prefiero evaluar sus pastas artesanales. Empiezo con los raviolones di arrosto (S/.32.00) rellenos de asado de res en su salsa. Hace mucho tiempo que no probaba unos raviones tan frescos y sabrosos. El relleno de asado tiene ese sabor casero y está jugoso como si lo hubieran hecho al momento. Ordeno también unos sorrentinos de jamón y mozarella (S/.32.00). Este tipo de pasta es parecida a los ravioles sólo que de forma redonda y un generoso relleno de queso que, si no los han probado antes, puede resultar algo empalagoso. Para mi gusto están perfectos aunque me quedo corto con la salsa a la crema. Vale la pena indicar que en ambos casos la porción es más que suficiente, además que traen una canastilla de pan crocante. No me iría sin probar una clásica milanesa napolitana (S/.34.00) Un filete de pollo crujiente y jugoso, al que no le iría mal un poco más de salsa pomodoro. El acompañamiento, según la carta, son unos spaghetti a la mantequilla, pero el exceso de ajo que lleva lo convierte en un plato aparte. Atención, esta milanesa se defiende sola, no necesita más condimentos.

Sorrentinos de jamón y mozarella. Milanesa napolitana.
Vitrina de postres.
En la sección de postres recomiendo que el pye de limón (S/.10.00). La receta se aleja del tradicional postre limeño prescindiendo de la leche condensada y la cubierta de merengue. La corteza de limón que usan en la crema le da una acidez intensa que lo acerca más a un key lime pie. Sigo con la torta imposible (S/.13.00), mitad crema volteada, mitad brownie con relleno de dulce de leche. Es recomendable compartirla o acompañarla de un buen café americano porque empalaga rápido. La torta de chocolate (S/.12.00) no me quita el sueño pero su doble relleno de manjar es suficiente para tomarla como referencia en la lista de las mejores tortas de chocolate. El eclair de nutella (S/10.00) es un reto para lo más dulceros. La nutella de por sí ya es dulce y coronarlo con merengue se me antoja un exceso, salvo que lo acompañen de un expreso. Paso con el tiramisú (S/.15.00) porque el sabor del café brilla por su ausencia y el merengue, nuevamente, asume un protagonismo innecesario. Valgan verdades, la semana pasada estuve en Ana Avellana y probé una versión de este postre que dudo tenga competencia. Queda de tarea para la casa evaluar sus macarrones y cupcakes.

Vitrina de helados.
¿Falta algo más? Sí, es obligatorio darse una vuelta por la estación de helados. Con 24 sabores a disposición hasta el más exigente encontrará uno a su gusto. He probado el de chocolate amargo al 64% que me dejó con un excelente gusto en boca. Lo combiné con helado de cereza, cuya acidez tenue se compenetra a la perfección con el amargo del chocolate, más aún si lleva trocitos de fruta. El helado de frutos del bosque viene en dos versiones: sorbete y yogur, aunque este último se me antojó un tanto ácido para comerlo solo. La casualidad me llevó a probar una combinación poco usual: coco y canela, lo más parecido a un queso helado que se pueda encontrar en Lima con la ventaja de no ser tan empalagoso. Las virutas de coco tostado con la sutileza de la canela puede convertirse en su favorita sin problemas. Ojo que también hay sorbetes de fruta y helados con stevia.

Estación de chocolates artesanales.
El servicio merece una buena calificación. Cuando los visité para almorzar en el salón fueron corteses y obsequiosos, atentos a las necesidades de la mesa. Cuando adquirí productos para llevar estuvieron listos para responder cualquier consulta. El personal de counter tiene mayor responsabilidad pues debe tener muy claro lo que ofrece porque la mayoría de opciones son nuevas para los clientes. Está claro que al ofrecer una propuesta con insumos gourmet, la atención al cliente no debe ir a la zaga.

Me retiro de Mozart European Gourmet muy satisfecho pero aceptando que aún tengo mucho por evaluar de esta nueva propuesta. Con más de diez estaciones en plena actividad no esperen que en un par de visitas lo conozca a fondo. Me consta personalmente que todo el equipo (counter, salón y supervisión) está más que involucrado en conquistar a sus clientes y eso me alegra. Sea para desayunar, almorzar, darse un gusto de media tarde o cenar, han desarrollado una propuesta contundente donde me siento ya un cliente habitual. No en balde tienen la foto de Mozart, uno de mis compositores favoritos, en la entrada.

Mozart European Gourmet queda en Av. Primavera 605, Surco.
Horario: Lunes a domingo de 8.00 a 23.00
Rango de precios: Platos de fondo S/.35.00-S/.57.00. Pastas S/.21.00 - S/.39.00, Ensaladas S/.19.00 -S/.26.00. Sándwiches S /.13.00 - S/.24.00. Postres S/.8.00-S/.19.00
Buffet de desayuno ilimitado: S/.39.00 por persona.
Volvería: De hecho. Hay todavía demasiado por ver.
Estacionamiento: Valet parking

lunes, 19 de septiembre de 2016

Osso (Carnívoros a la orden)

Carnívoros del mundo uníos. Obvio, siempre y cuando estén dispuestos a pagar el precio.

Uno de los desafíos más grandes para visitar restaurantes es elaborar cuidadosamente el presupuesto mensual. El riesgo que la experiencia no resulte como uno espere implica no disponer de ese monto para visitar otros restaurantes. Así que, y lo digo sin ningún remilgo, aproveché que mi tarjeta BBVA me concedió un generoso descuento para agendar sin pérdida de tiempo una visita a Osso. 

Cortesía de la casa.
Trás un largo periplo por las congestionadas vías de La Molina (alguien tuvo la "ideota" de hacer reparaciones durante el fin de semana) llego a La Planicie. Genial todavía no abre el local pero no es un problema, tengo a mi disposición harto sitio para estacionarme con paciencia. Veo que no soy el único, hay otro cliente ansioso interrogando al encargado sobre el horario de atención. Para hacer tiempo entro a la tienda de Osso para ver qué hay de nuevo. Tal vez debiera hacer un post doble pero quién diría que al final los hados terminarían poniéndose en mi contra. Listo, el restaurante ya abrió sus puertas.

El encargado me ubica sin problemas cerca de la entrada y me trea la carta. Vaya, no ha cambiado mucho en un año así que me limitaré a probar las opciones que dejé de lado en mi anterior visita. Mientras decido que pedir el mozo trae la cortesía: dos tipos de panes artesanales con rilettes y mantequilla de carne. Coger un trozo humeante de pan y untarlo con los acompañamientos tranquilamente podría representar el fin de la experiencia de lo buenos que estaban. Hubiera repetido de no ser porque me llenaría gratuitamente.

Sliders, BBQ Ribs. Chuleta de hombrio
De entrada elijo las Sliders (S/.30.00), tres mini hamburguesas de carne de res madurada. Tres bocados de carne jugosa que no necesitaría ningún aderezo aunque la presentación lleva una salsa de la casa llamada "animal" que potencia más su sabor. El pan está hecho con chives y queso cheddar y mantiene la consistencia ante lo jugoso de la carne. Mi segunda opción fueron unas BBQ Ribs (S/.43.00). que debieron ser devueltas a la cocina por que era imposible cortar una porción de lo resecas que estaban. Salvo que vuelvan a hacer el plato desde cero difícil que puedan arreglar la situación así que me conformé ordenando salsa BBQ adicional. Algo así como una variante de "con ají todo pasa". 

Seguimos con una chuleta de hombro (S/.49.00), un corte muy especial del cerdo donde se juntan cinco músculos y una suculenta capa de grasa. Si a eso le agregamos que la carne es procesada con aceite de oliva y una mezcla de hierbas antes de llevarla a la parrilla, entonces el resultado es un corte muy sabroso y que provoca comer un bocado tras otro. Como para variar de la clásica chuleta de pierna que se encuentra por doquier.

T-Bone
El plato fuerte de la hornada es el T-Bone (S/.190.00), corte americano que lleva un hueso en forma de "T" separando dos tipos distintos de carne. Acá puedo sentir con más intensidad ese sabor a tierra que tienen los cortes madurados y que ha sobrevivido a la intensidad de la brasa. Aunque no me deja satisfecho que la cocción no haya sido pareja, tal cual pueden ver en la foto. El mozo ofrece chimichurri de la casa y ají ahumado de Arde Charapa, más yo siento que "disfrazar" la carne con salsas es casi una herejía. 

Adicionalmente les recomiendo pedir como acompañamiento una ensalada fresca (S/.24.00) con lechuga, palta y encurtidos. Es suficiente para limpiar el paladar y alcanza de sobra para compartir. Otros adicionales como las papas amarillas fritas o el puré de papa "trufado" sólo contribuirán a elevar injustificadamente el precio de la cuenta. Habiendo consumido tal cantidad de carne, excepcionalmente, no hubo espacio para postre. 

El servicio fue mucho mejor que en la anterior visita, atento a la mesa y a recoger los servicios usados. Incluso se tomaron el trabajo de presentar los platos y hacer recomendaciones. Una crítica común es el menaje. Entiendo que se quiera dar una imagen rústica utilizando papel craft, secadores y tablas de maderas en lugar de manteles, servilletas y vajilla pero eso implica una revisión constante porque el deterioro es más rápido. Las tablas de madera, por ejemplo, se avejentan con cada corte y no dan una buena imagen.

Me retiro medianamente satisfecho de Osso. Salvo por las costillas de cerdo, me quedo con buen sabor de boca pero sé que me tomará un tiempo regresar. La experiencia es muy costosa, y aunque quiero seguir entrenándome en el gusto por la carne madurada, es obligatorio disponer de un presupuesto aparte. Y también de tiempo para cruzar el cerro Centinela.

Osso queda en Tahití 175, La Molina.
Horario de 13.00 a 15.30 19.00 a 23.00
Teléfono: 368-1046
Ticket promedio: S/.150.00 por persona.
Estacionamiento: Si no llegan temprano no van a encontrar.
Volvería: Cuando abran su local en San Isidro. A la Molina no voy más. Tengo mis razones.

martes, 13 de septiembre de 2016

A blogger que madruga...

"A quién madruga Dios lo ayuda" decían las abuelas. Puede que sí y puede que no, pero lo cierto es que al menos encontrará estacionamiento. 

Café de Lima (It's 8 o'clock somewhere)

Hay una correlación entre la marcha blanca de un restaurante y la animosidad con que se escribe de ellos en ciertos foros gastronómicos. Si al comensal le ofreces una carta con descuento es obvio que su percepción podría verse afectada y ser más condescendiente con los errores. Yo soy un escéptico de nacimiento y huyo de la novelería limeña como el diablo del agua bendita. Entenderán por qué me tomé un tiempo razonable antes de visitar Café de Lima.

Llego temprano y feliz veo que hay harto espacio para cuadrar. Entro al local y la anfitriona me conduce a una mesa en el ambiente posterior. Me traen la carta de desayuno con opciones de omelettes hecho con huevos de corral, sándwiches clásicos y creaciones de la casa, y los clásicos y saludable bowls. (Por si acaso no tienen de acai.) No existe mejor manera de empezar mi día que un buen café americano sin azúcar. Me traen uno intenso y robusto, preparado con un doble expresso con café procedente de Jaén. Vamos bien, aunque lo ideal hubiera sido ver un vaso de agua con hielo en la mesa. 

Pan con palta. Waffles de brioche.


¿Quién lo diría? Un pan con palta (S/18.00) es mi primera elección de la carta. Es un clásico de los desayunos limeños que, en los últimos meses, ha sido reinventado por diversas cafeterías con un incremento justificado (¿o no?) en el costo. Me traen una tablita con sendas tajadas de pan campesino con topping de palta, uno con huevos codorniz a la inglesa y otro con rabanitos y tomate orgánico. La acidez del pan se equilibra con la untuosidad de la palta y los rabanitos aportan un toque de frescura. En cuanto a los huevos de codorniz es una combinación nueva para mí aunque resulta agradable, más que nada por la pizca de togarashi. Sigo con unos waffles de brioche (S/.16.00) que me dejan sin palabras. No es sólo el tamaño de la porción que alcanza de sobra para dos personas, sino por el topping de frutos rojos, almendras, miel y crema de mascarpone. Si los piden, recomiendo avisar al mozo que lo desean sin leche fresca, no aporta nada y arruina el crocante de los waffles.

Chicharrón al horno. Revuelto de domingo


Pido el revuelto de domingo (S/.18.00) para satisfacer una duda que llevo arrastrando de niño. Por alguna razón en mi casa nunca prepararon un desayuno con chicharrón de prensa, y esta es la ocasión perfecta para salir de la duda. Pequeño detalle, aquí no utilizan el embutido en molde sino una preparación artesanal que no resulta muy apetitosa. Más que nada por un gusto personal no es algo que volvería a ordenar. El sándwich de chicharrón (S/.18.00) es una vuelta de tuerca al tradicional porque utilizan panceta al horno. Dos puntos a favor: el pan francés muy crocante y la textura jugosa de la carne. Punto en contra, la intensidad de la salsa criolla que deja en segundo plano al cerdo. Mejor pídanla aparte. 

Satisfactoria experiencia en Café de Lima. No es una propuesta económica pero está justificada por la calidad de los insumos y la preocupación por brindar algo diferente. Vale la pena agregar que demostraron un gran nivel de proactividad ante un reclamo que hice. Asegurarse que el cliente se retire completamente satisfecho es señal que se toman en serio su trabajo. Y de mi parte está más que claro que regresaré para evaluar sus propuestas de almuerzo y cena. A qué hora no puedo precisarlo pero que vuelvo, vuelvo.

Café de Lima queda en Av. Angamos Oeste 1003, Miraflores.
Ticket promedio: Sándwiches S/.15.00-26.00. Omelettes/ Huevos revueltos S/.18.00-23.00 Bebidas S/.6.00-12.00
Volvería: Obvio. Todavía hay mucho por ver.


Tony Patisserie (Cerca de tí, cerca de todos)

Vista del local.
Vitrina de panes.
Aún recuerdo cuando hace dos años me llegó una invitación para visitar una pastelería en San Miguel. Un local pequeño y acogedor, donde Tony Regalado, chef pastelero de profesión, me presentó orgulloso cada una de sus creaciones. Obvio, cuando se lleva el ADN de la pastelería en las venas, no se escatima en darle lo mejor a sus clientes y estaba claro que había descubierto uno de mis sitios favoritos. Sólo había un pequeño detalle a tomar, quedaba bastante lejos de mi casa. 

Por eso cuando me contaron que abrirían una sucursal en la zona de Las Casuarinas sentí en mi cara un airecito muy parecido al de  "La Rosa de Guadalupe". Vamos, soy fan acérrimo de los postres de Tony pero manejar hasta San Miguel es un reto que sólo puedo afrontar los fines de semana, cuando me desconecto de las preocupaciones laborales.

Como ya tenía la dirección no pude aguantar hasta la fecha de inauguración para ir a gulusmear que había de nuevo. El local sigue la misma onda de Sweet & Salad. En la vitrina encuentro mis viejos conocidos: las trufas de Bailey's, los macarrones y el Saint Honoré, que no tienen punto de comparación en todo Lima. ¿Pero qué veo? También está el yogur griego, que causaron una revolución durante los desayunos buffet que Tony organizó el año pasado.

Vitrina de postres.
Novedad, la propuesta de panadería. Esta su famosa empanada con masa de elaboración artesanal y un relleno generoso de pura carne molida, pero también novedades como los croissante y la trenza de canela con castañas. El mejor acompañamiento para un café americano o sí desean té alemán Gschwendner con frutos del bosque. ¿Mencioné que también ofrecen sándwiches con panes hechos en casa? Pan de centeno con pollo y pecanas, caprese gratinado y el intrigante bunker, con doble queso y jamón caliente.

Como verán, la nueva propuesta de Tony Regalado tiene algo para cualquier hora del día. Sea para desayunar o para darse un antojo o para un té vespertino, para comer allí o para llevar, este el lugar que hace tiempo estaba esperando. ¡Muchos éxitos en esta nueva aventura, Tony!

Tony Patisserie queda en Mariano Eduardo de Rivero y Ustariz 189, Surco. 
Altura cuadra 2 de la Av. Casuarinas.
Ticket promedio: S/.15.00 por persona.
Volvería: Cada semana. Sin dudarlo.

Experiencia EVDC V (Los viciolovers madrugan)

Fue en la última reunión con los seguidores del blog que surgió la inquietud por visitar un desayuno buffet. Yo creo en la democracia y fue por unanimidad que eligieron el Hilton Lima Miraflores para el siguiente encuentro. 

Siendo domingo en la mañana y con las vías tan despejadas llegué en un periquete al Social Restaurant Bar. Veo con sorpresa que hay un grupo de seguidores esperándome. Tal parece que mi insistencia en la puntualidad alemana ("cinco minutos antes de la hora") ha calado fuerte en el grupo. Ni modo, si queremos pasar una buena experiencia el compromiso de asistencia y la puntualidad son claves.

#Viciolovers en pleno disfrute.
Degustación  de platos salados y ducles
No entraré nuevamente en detalles contando todo lo que ofrece el desayuno personalizado del Social Restaurant & Bar. Suficiente con mencionar que uno no necesita levantarse de la mesa. Los mozos van con carritos ofreciendo las diversas opciones y además tienen una carta de platos hechos al momento que pueden consumirse ilimitadamente.

La jornada empieza con opciones saludables: smoothies, jugos de la casa y yogur griego a discreción. Los pancitos de yuca hacen su aparición para deleite de todos pero veo que se están midiendo. Está claro que todos quieren guardar reservas para el plato fuerte: la tabla con waffles, panqueques y tostadas francesas. Cuando llega a la mesa todos sacan sus cámaras para registrar el momento más dulce de la jornada. Pero había un as guardado bajo la manga. Uno de los asistentes solicitó una combinación de cinco platos salados, casi una bandeja paisa, cuya existencia desconocía. Está visto que se han tomado en serio el concepto de desayuno "a la peruana"

Social Restaurant Bar nuevamente estuvo a la altura de las circunstancias con su desayuno personalizado. La calidad de la propuesta estaba descotnada pero el servicio fue lo que más cautiv a los asistentes. De principio a fin estuvieron atentos a todos los pedidos especiales que les hicimos y respondieron oportunamente. De mi parte sólo queda decir: "Hasta el siguiente encuentro". 

¿Alguien dijo Chifa Titi? Quizá. Los seguidores mandan.

Hilton Lima Miraflores queda en Av. La Paz 1099, Miraflores.
El desayuno personalizado del Social Restaurant Bar cuesta S/.72.00
Volvería: Sí, es una excelente alternativa a los buffet que ofrecen otros hoteles.

domingo, 4 de septiembre de 2016

27 Tapas (Cuenta regresiva)

Alrededor de las torres de Camino Real han aparecido en los últimos meses varios restaurantes: Quinoa, Convivium, Loreta, Félix Brasserie, Esen Döner. Todos con diferentes propuestas pero con el mismo objetivo: captar la atención del público ejecutivo que labora por la zona. Algunas propuestas son como aves de paso y quedan en buenas intenciones, otras logran conquistar su nicho y salen triunfantes. Pero que cuesta trabajo y tiempo, les cuesta.

Detalle de la barra
En medio de la vorágine de restaurantes de la zona empresarial de San Isidro surge una nueva presencia: 27 Tapas, creacion de Carlos Testino, el mismo chef de Lima 27. Es una propuesta dirigida a los ejecutivos que buscan un lugar para desconectarse del trabajo en un ambiente sofisticado y con una carta que brinda las mejores opciones para un after-office. Además, a la hora de almuerzo ofrecen un menú de precio fijo con cinco entradas y fondos. Tal cual me lo describieron quedé intrigado y acepté la invitación para evaluar ambas propuestas.

Con 4 meses de existencia 27 Tapas retoma el concepto del, valga la obvia redundancia, tapeo español, adaptándolo al gusto peruano a través de nuevos sabores y porciones generosas. El círculo se cierra con una nutrida carta de tragos de la casa y cervezas artesanales.

Pido apresurado la carta para comprobar el origen del nombre: doce tapas frías, nueve calientes y cinco sanguchitos (los archiconocidos "buns"), charcutería y uno que otro plato caliente. Empezamos con un montadito de erizo (S/.16.00) donde la frescura del insumo lo es todo, aunque el guacamole amerita una revisión porque su intensidad asume un protagonismo indebido. Sigo con el montadito de salmón (S/.14.00) que junto a una crema de jamón Joselito logran una impecable combinación mar y tierra. Para redondear la experiencia me sirve un "Hi 5" sashimi (S/.30.00), el sashimi común y corriente de la pesca del día presentado sobre una escultura de hielo en forma de mano. Es opcional remojar los cortes en la salsa oriental de acompañamiento, aunque conociendo al comensal peruano, seguro que darán buena cuenta de ella.

Montadito de salmón. Rabo & tuétano
Pulpo a la gallega. Montadito de erizo.
Estoy ubicado en la terraza del local y el clima inmisericorde me exige algo caliente sin pérdida de tiempo. ¡Que me traigan un rabo y tuétano (S/.18.00)! Es el conocido guiso español acompañado de pan tostado. No hay pierde con el rabo de toro si está bien ejecutado (cocción larga a fuego lento. El resultado es impecable en sabor y además el tuétano aporta. El segundo plato fue un pulpo a la gallega (S/.16.00), un guiso que no trae sorpresas más si una correcta ejecución del insumo principal, suave y con el toque preciso de pimentón. La cuidadosa presentación se merece un párrafo aparte aunque viéndolo bien es la impronta de Lima 27. Pequeño detalle, no veo el helado de ají amarillo que indica la carta, aunque tampoco lo echaría de menos.

Causa de pejerreyes crocantes. Tiradito de almejas.
Espresso BBQ Burger. Meloso de mariscos.
Aprobadas las tapas, toca evaluar las opciones del Prix Fixe Menú (S/.39.00 incluyendo una bebida no alcohólica). Empiezo con el tiradito de almejas donde la leche de tigre con ají amarillo es sútil y deja sobrevivir todo el sabor de los maricos. El camote aporta un toque de equilibrio. La causa de pejerreyes crocantes, nuevamente, enamora por la presentación pero el trabajo en cocina ha sido correcto. Los pejerreyes crocantes se complementan con una suave crema al olivo y una masa de papa que no aturde por exceso de sazón. 

De fondo me sirven la  Espresso BBQ Burger, una hamburguesa en salsa de la casa y cebolla caramelizada. Si bien el pan brioche está "blindado" con un wafer hecho con papel de arroz el término de la carne, muy jugosa, lo humedece rápidamente. Eso explica porque me entregan un par de guantes quirúrgicos para comerla con la mano. La hamburguesa es sabrosa y se deja comer tal cual sin ningún tipo de salsa adicional. El último plato es un logrado meloso ibérico de mariscos. Mala idea: dejarlo al final porque estoy más que satisfecho. No importa, basta probar un bocado para sentir el punto correcto de cocción de los mariscos y la textura adecuada. Pasa la prueba.

"Hi 5" sashimi
¿Hubo espacio para postre? Sí, pero ya se los dejo de tarea a ustedes. Ordenen los Jimmy berries y cuando lo traigan a la mesa no creerán lo que ven sus ojos. Dudo que en Lima exista un restaurante que ofrezca un postre parecido.

Me retiro de 27 Tapas con buen sabor de boca y con la sensación que todavía hay mucho por ver. Quiero seguir investigando el resto de la carta para evaluar si la calidad es pareja. Tengo en la mira el jamón Joselito aunque la idea sería acompañar la velada con una botella de buen vino español. Desconectarse de las preocupaciones laborales siempre es conveniente, más hacerlo en un ambiente acogedor con una propuesta gastronómica bien cuidada es lo ideal para todos los viernes. Mejor aún en compañía de amigos o pareja así que empiecen a contar sus tapas. A mí ya sólo me faltan 21.

27 Tapas queda en Santa Luisa 295, San Isidro. 
Horario: Lunes a sábado de 12.00 a 24.00. Domingos de 12.00 a 16.00
Teléfono: 221-5822
Estacionamiento: Valet parking.
Ticket promedio: Tapas de S/.12.00 a S/.30.00. Fondos S/.21.00 a S/.46.00
Volvería: Sí, quiero probar el resto de la carta.